viernes, 22 de agosto de 2014

Bautistas Reformados

Hace algunos años, un número de iglesias comenzaron a llamarse “Iglesias Bautistas Reformadas”. Desde entonces, a los ancianos y los miembros de estas iglesias se les ha pedido una y otra vez que respondan a preguntas como:”¿Qué es una Iglesia Bautista Reformada?” Y “¿Qué se está tratando de reformar? A muchos les resulta difícil responder a estas preguntas de forma concisa y eficaz. Algunos se limitan a decir: “Somos lo que los Bautistas de antaño solían ser!” Si bien esta afirmación es cierta, a la mayoría de la gente, creyentes como no creyentes, esta les explica muy poco.

Es mi objetivo tratar de ayudar tanto a los cristianos que desean saber el real origen de la denominación, como a los que no lo son y cuestionan la naturaleza de la misma. Es esta entonces la pregunta que me propongo a responder “¿Qué es una Iglesia Reformada Bautista?”

Para tal fin, deseo abordar la respuesta, desglosando la pregunta en 2 partes, a saber: 1) ¿Qué se entiende por Reformada? y 2) ¿Qué se entiende por Bautista?

1) ¿Qué queremos decir con “Reformada”?

El título “reformado” explica nuestras raíces históricas y doctrinales. Hay un conjunto de verdades teológicas que comúnmente se conoce como “La Fe Reformada”. Tales verdades bíblicas, las cuales deben ser brújula de la Iglesia de Cristo, se resumen en los siguientes 5 aspectos, conocidos como “5 solas o cinco solas”. Estos 5 pilares doctrinales son señal distintiva entre aquellos que se llaman Cristianos Reformados.

Solo Fe (Creemos en el perdón de los pecados y en la justificación solamente por la fe en Jesucristo, Señor nuestro)
Solo Gracia (La salvación de un pecador no es un acto iniciado, generado o ayudado por el hombre en ninguna manera, es a causa sola de la soberana gracia de Dios)
Solo Escrituras (Sólo las Escrituras constituyen la norma autoritativa para la vida del creyente y de la Iglesia de Jesucristo y es fundación inamovible y base para la fe y la práctica)
Solo Cristo (Sólo hay salvación a través de Cristo Jesús)
Solo Dios de Gloria (Sólo Dios recibe la gloria en la salvación de los pecadores)
De otra parte la fe reformada es bien caracterizada por su sujeción incondicional a la soberanía de Dios, y de manera particular en lo que respecta a la salvación del hombre, a saber: que antes de la fundación del universo, Dios ha elegido a ciertos pecadores para salvación. Lo ha hecho soberanamente y de acuerdo con su buena voluntad. La fe reformada enseña que, en su debido momento, Cristo vino y murió por los pecados de aquellos elegidos, es decir, de aquellos que fueron elegidos de manera soberana antes de los siglos. La Fe Reformada enseña que la aplicación de la gracia salvadora en una persona que se arrepiente de sus perversidades y pecados y que tiene fe en Jesucristo, es a través del Espíritu Santo, que actúa en armonía con el decreto del Padre y la muerte del Hijo. Leer Más…

Por lo tanto, cuando decimos que una iglesia es Reformada, estamos diciendo también que abrazamos el sistema de teología conocido como las “doctrinas de la gracia”: y estas no son más que las siguientes verdades bíblicas:

La depravación total del hombre
La naturaleza incondicional de la elección de Dios Padre
La naturaleza limitada o particular de la expiación (es decir que Cristo derramó su sangre específicamente por las mismas personas que el Padre elige, a los cuales entonces su Espíritu regenera)
El carácter irresistible del llamamiento eficaz, y;
La perseverancia y la preservación de los santos.
La fe reformada tiene que ver con la gloria de Dios en la Iglesia, en la sociedad, en la familia, y en una vida de santidad. En esta tradición “reformada” están partícipes los grandes nombres de la historia de la Iglesia: Juan Calvino, John Knox, John Bunyan (autor del Progreso del Peregrino), John Newton, el famoso comentarista bíblico Matthew Henry, el gran evangelista George Whitefield, el gran teólogo estadounidense Jonathan Edwards, William Carey, C.H. Spurgeon, A.W. Pink, Peter Masters, entre muchos otros que se han asido de las Escrituras como la única normativa de fe y de práctica.

Nosotros, los Bautistas Reformados, tenemos como objetivo darle la gloria a Dios con nuestras vidas y en nuestras iglesias. Dependemos de la Gracia de Dios para agradarle y permanecer obedientes a Su Palabra. Creemos fielmente en la santificación progresiva (es decir, en el proceso de la mortificación de nuestra carne y deseos y de los residuos pecaminosos que aún permanecen en nosotros como creyentes. Creemos en una vida de testimonio que le de toda la gloria al Señor y también creemos en el mandato de la separación. Pero, separación de qué? podrá ser la pregunta. Hay dos tipos de separación, a los cuales nos referimos:

Separación Primaria: Esta es la separación o no comunión en hermandad fraternal, con las iglesias que se han apartado de las verdades bíblicas al haber adoptado errores doctrinales, bien sea a causa de una mala interpretación bíblica o a causa de convenientes normativas humanas que benefician a sus líderes y a su desobediencia negligente. Un ejemplo claro de ellas son los movimientos cristianos carismáticos, ecuménicos y pentecostales.
Separación Secundaria: Esta es la separación o no comunión en hermandad fraternal con los verdaderos creyentes que siendo salvos, están asociados con otras iglesias o individuos que viven en el mal testimonio de un profundo error doctrinal.
2) ¿Qué queremos decir con “Iglesia Bautista”?

El Bautista cree, de acuerdo con las Escrituras, que sólo quienes hayan sido convertidos y bautizados pueden pertenecer como miembros de la iglesia de Cristo. (Esto no quiere decir en ningún momento que el bautismo es condición para la salvación, No! – O que sin el bautismo un creyente no puede ser salvo, No, Tampoco! o que si una persona no es bautizada, tampoco puede ir a la iglesia, No! De ninguna manera!)

Otros aspectos de los Bautistas son los siguientes:

Creemos en la Membresía Regenerada: Este es el proceso mediante el cual una persona es aceptada dentro de la membresía de la iglesia local, después de profesar la fe Cristiana, de haber sido bautizada, de leer su testimonio públicamente y después de que su carácter y testimonio en lo que respecta a su manera de vivir refleje las marcas inequívocas de la gracia Salvadora de nuestro Señor Jesucristo.
Creemos en el bautismo estipulado en las Escrituras por inmersión de aguas y no por el rociamiento de las mismas.
No bautizamos a los niños, ni tampoco son admitidos personas dentro de la membresía de la iglesia local. (Creemos firmemente en la salvación de los niños, independientes del hogar o religión donde hayan nacido. Creemos que la salvación de los infantes es un acto soberano de Dios.)
Lamentablemente, muchas iglesias hoy día están más preocupadas por tener una lista larga de miembros que en cerciorarse de tener una membresía regenerada. Un pastor Bautista Reformado tiene que, en oración y gran discernimiento espiritual, cerciorarse (hasta dónde humanamente le sea posible) que las personas que solictan ser miembros de la iglesia local, hayan sido regenerados por el Espíritu Santo y sus vidas muestren esas marcas de la gracia de Dios en ellas. Es un deber del pastor y de los ancianos que lideran el rebaño de una Iglesia Bautista Reformada, evitar en la mejor de sus capacidades que alguna persona que no ha sido salva, sea admitida en la membresía de la iglesia local – Es más, es un gran peligro!

Las marcas distintivas de una Iglesia Bautista Reformada

El corazón de este estudio se centrará en las iglesias que se adhieren a la Confesión Bautista de Fe de 1689, tanto en práctica como en teoría. Esto resolverá las cuestiones controvertidas de antemano como la cuestión del principio regulativo (el orden de los Servicios o Cultos al Señor), el Día de Reposo del Señor, el diezmo y las ofrendas, los 10 mandamientos, etc… Para adherirse a la confesión de Fe Bautista de 1689 tanto en práctica como en teoría, necesitamos estar convencidos que tales verdades doctrinales allí estipuladas y sustentadas sean “ciertísimas entre nosotros.” – Como ya lo hemos manifestado antes, aunque la Confesión no es un documento inspirado, ciertamente es ampliamente aceptado como el sumario o la compilación doctrinal más gloriosa de todas! (De nuevo, exceptuando claro está, las Escrituras las cuales son la norma autoritativa en fe y práctica de los creyentes y de la Iglesia local)

1. Las Iglesias Bautistas Reformadas se distinguen por su convicción en cuanto a la suficiencia y la autoridad de la Palabra de Dios. Mientras que todos los verdaderos cristianos creen en la inspiración y la infalibilidad de la Palabra de Dios, no todos creen en la suficiencia de la Biblia. Sólo los verdaderos cristianos creen que la Biblia fue inspirada en su totalidad por Dios y que es infalible y sin error en todas sus partes. Negar esto es llamar a Dios mentiroso, y por lo tanto, perder su alma.

De otra parte, mientras que todos los verdaderos cristianos deben creen esto, no todos están de acuerdo en lo que respecta a la vida y al gobierno de la iglesia local. Es más, existe la creencia común de que la Biblia no es una guía suficiente que nos pueda indicar “cómo se forma y gobierna una iglesia”. Esta es la causa del crecimiento abrumador de la iglesia moderna quien se acomoda a los tiempos para instituír reglas y normativas cuyos principios no están en las Escrituras.

Es por ende que muchos pastores modernos se sienten en la libertad de “reinventar” tanto la iglesia, como los principios normativos que la regulan. Parece ser que los grupos pentecostales, carismáticos y otras denominaciones de Cristianos, importan del mundo las cosas a sus iglesias (convirtiéndolas en mundanas) en vez de separarse de estas para ser santos y apartados y obedientes para la Gloria del Dios Vivo!

2. Las Iglesias Bautistas Reformadas tiene la convicción de que la Biblia y solo la Biblia nos ordena acerca del orden y del gobierno de una iglesia. La Biblia y sólo la Biblia define los roles de los líderes permitidos dentro de la iglesia (Pastores, Ancianos y Diáconos). La Biblia nos habla también del número de ancianos y de la responsabilidad de los tales (pluralidad de ancianos y diáconos pero con un anciano que lidera y es este quien dará cuentas a Dios Padre de todas sus ovejas), también nos habla de las calificaciones necesarias para aspirar a tal puesto y de sus funciones distintivas (ver Hechos 20, 1 Tim.3, Tito 1, Heb. 13, y 1 Pedro 5).

3. Las Iglesias Bautistas Reformadas se distinguen por una convicción inquebrantable de que la iglesia existe para la gloria de Dios. Debido a que la iglesia existe para la gloria de Dios, la adoración de Dios y la Palabra de Dios son fundamentales para su vida. Las iglesias modernas, carismáticas y pentecostales se enfocan más en las sensaciones y en el éxtasis de la adoración sensual e irreverente que en la Voluntad de Dios manifestada en las Escrituras; parece ser que muchas de las iglesias de hoy se enfocan en ser “un lugar de paz y de relajo” y de convertirse en “amenas y amables” a costas de la obediencia y la reverencia. Nosotros creemos firmemente que las iglesias tienen que estar mucho más preocupadas por agradar a Dios y procurar Su sonrisa sobre ellos que por agradar y complacer al hombre. La Biblia es una guía suficiente para decirnos qué es la adoración y cómo se debe conducir la adoración de acuerdo con las Escrituas.

4. Las Iglesias Bautistas Reformadas se distingue por su convicción de que la iglesia local es fundamental para los propósitos de Dios en la tierra. Mientras que muchos han diagnosticado correctamente el fracaso de la iglesia para realizar su misión, la respuesta a tal fracaso es el abandono de la iglesia de los principios bíblicos. La iglesia local debe buscar ante todo y de manera constante su reforma y su santificación tanto individual (en sus miembros), como colectiva (como cuerpo de Cristo).

La iglesia es la única morada especial de Dios sobre la tierra (Ef. 2:22). La gran comisión de la iglesia se cumple cuando predicadores del evangelio son enviados por las iglesias locales para plantar nuevas iglesias. La iglesia es entonces formada por la voluntad de Dios Padre, quien aplicando la gracia de nuestro Señor Jesucristo a través del Espíritu Santo procede con la conversión de las personas. Muchas personas bien intencionadas y organizaciones están tratando de asumir la tarea que el Dios Vivo le ha confiado a su Iglesia. A quien nuestro Dios ha confiado el mandato misionero? ¿A quién le dio Dios a las instrucciones para el evangelismo y para la agrupacion de los creyentes? A asociaciones evangelísticas misioneras? No. A personas independientes con buena voluntad? No. Los movimientos carismáticos y pentecostales están más enfocados en células, en estudios bíblicos en las casas de sus miembros y en ministerios para-eclesiásticos que en obedecer el mandato del Señor en las Escrituras en lo que respecta a la unidad de laiglesia como cuerpo Suyo.

5. Las Iglesias Bautistas Reformadas se distinguen por su convicción de que la predicación pública del Evangelio es fundamental para la vida de la iglesia. Como Bautistas Reformados, nos aterrorizamos que muchas iglesias no tengan la menor de las ideas acerca de lo que evangelismo significa. El evangelismo del cual habla la Escrituras, es una labor ardua y preciosa. Estamos hablando de que tenemos tanto el privilegio como la inmensa responsabilidad de ser usados por el Señor en lo que respecta al estado eterno de las almas con las cuales hablamos. Nos entristecemos al ver las tendencias de estos tiempos actuales donde las iglesias cristianas (aún muchas reformadas, lo digo con tristeza) no evangelizan con fuerza ni con ardor, ni tampoco con pasión por las almas.

6. Las verdaderas iglesias Bautistas Reformadas se distinguen por la convicción de que la salvación altera radicalmente la vida de una persona verdaderamente convertida. Es trágico que me detenga en este punto un poco, pero me es menester llamaros la atención hacia uno de los cánceres de la iglesia moderna: El decisionismo! Esta es la tendencia de moda en el mundo pentecostal y carismático donde los defensores de tan grande farsa no-bíblica, defienden que las personas que pasen al altar y que repitan cierta oración y que luego “reciban a Cristo en sus corazones” son salvos – De dónde se origina esto? Charles Finney (1792-1875) fue quien introdujo este método totalmente anti-Escritural – Este método no está en las Escrituras.

Esta mala práctica lleva a la confusión y al desespero de muchos que dicen profesar la fe en Cristo, quienes después de “haber aceptado a Jesús en sus corazones” nunca han experimentado la obra regeneradora por parte del Espíritu Santo. Sus vidas por ende nunca han cambiado; sus tendencias pecaminosas siguen siendo las mismas, antes y después de haber pasado al altar a hacer la confesión de fe; no tienen ellos ni el deseo, ni el celo, ni el anhelo, ni tampoco entienden las cosas santas. Tampoco se unen en servicio y ardua labor en la iglesia local! En fin, el decisionsimo quizás, será la causa que muchos personas escuchen las terribles palabras de nuestro Salvador: “… No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos…”

7. Las Iglesias Bautistas Reformadas tienen la convicción que la Ley de Dios (como se expresa en los Diez Mandamientos) es regulativa en la vida del creyente del nuevo pacto (ver Jere. 31:31-34 y 1 Juan 2:3,4). El apóstol Juan nos dice que si nosotros decimos “conocer” a Dios y sin embargo no guardamos sus mandamientos, somos mentirosos y la verdad no está en nosotros. Jesús dijo a sus discípulos que la forma en que se demostraría que realmente eran sus discípulos era obedeciendo sus mandamientos. El principio moral de la Ley del Señor nunca fue abolida! - Si bien es ciertísimo que la salvación es por Gracia y no por obras, es también ciertísimo que la persona salva, tiene la ley de Dios como estándard moral perpetuo y desea agradar al Señor en su sujeción a esta.

8. Las Iglesias Bautistas Reformadas creen y guardan el Día del Señor; es solemne para nosotros. En los últimos años se ha visto un ataque implacable contra el cuarto mandamiento. El hombre moderno es tan adicto a sus placeres, juegos y entretenimiento mundano, que el pensamiento de tener que renunciar a estos por 24 horas, para adorar y deleitarse en la misericordia de Cristo y servirle al Dios vivo, es una esclavizante actitud legalista. Es una pena de veras ver a los que profesan amar a Jesucristo darse a cosas mundanas en el Día del Señor, un día Sagrado que El mismo consagró para que se lo dedicásemos en adoración, acción de gracias y en servicio! Para el verdadero pueblo de Dios, es decir, para los que aman sus mandamientos y para los que meditan en Cristo con deleite y gran agradecimiento por la salvación de sus almas, tal mandamiento no es esclavitud, sino un don precioso!

9. Las iglesias Bautistas Reformadas se distinguen por una convicción sobre el liderazgo masculino en la iglesia. Nuestra época ha sido testigo de la feminización de la cristiandad. Dios creó dos sexos en la creación y le dio a cada uno roles diferentes y particulares – Solo la desobediencia a las Escrituras y el inconformismo con las normas divinas, hacen que alocadas y necias reglas inventadas por el hombre se conviertan populares. Mientras que los sexos son iguales desde la perspectivas divinas de la Creación, de la Caída y de la Redención, Dios ha ordenado no obstante de manera soberana el liderazgo del varón en el hogar y en la iglesia. Cuando la Biblia habla de esposos y padres líderes en el hogar no está condicionando culturalmente la obediencia a tales mandatos, No! Tampoco se nos puede acusar de machistas, pues con la misma línea de pensamiento podríamos probar que quienes llaman machistas a aquellos quienes están en contra de que la mujer ejerza un rol pastoral, son feministas y desobedientes con las Escrituras!

Cuando la Biblia habla de hombres que llevan el liderazgo en la oración, la enseñanza, la predicación, y a servir como ancianos y diáconos, nosotros debemos acatar tal mandato con devoción y de la misma manera con la que acatamos las demás ordenanzas.

10. Las iglesias Bautistas Reformadas contrastan sustancialmente de las siguientes denominaciones:

Los Carismáticos (Quienes creen en una “mezcla” -por así decirlo- de algunas doctrinas cristianas con prácticas de alabanza modernas y con otros elementos doctrinales ajenos a las Escrituras. La mayoría de nuestros amigos carismáticos creen en que los dones del Espíritu Santo están en vigencia -aún cuando el Canón de las Escrituras se selló- creen que los demonios pueden entrar en las vidas de los creyentes -aún cuando supuestamente el Espíritu Santo viva en el creyente- creen en el don de lenguas -aunque no lo pueden interpretar- creen también que hay profetas y que Dios habla por medio de ellos como en los tiempos antiguos, etc.
Los Arminianos o aquellos que sostien algunos de los puntos Arminianos (aún sin saberlo!) Creen que el hombre es libre en su voluntad y que puede – aún estando muerto en sus delitos y pecados, como nos lo muestra las Escrituras- escoger por Cristo, aceptarlo en su corazón como una decisión propia. Miren lo que sigue a continuación, ellos dicen que el hombre puede cooperar con Dios… Que? Que el hombre puede cooperar con Dios como si Dios necesitara ayuda para salvarlo? No.! Las Escrituras nos muestran que la salvación proviene exclusivamente de la soberna gracia de Dios y Dios en Su palabra nos alienta y nos dice que nunca, nadie quien haya ido a Cristo en fe y sincero arrepentimiento ha sido rechazado – Eso es aliento de parte de Dios, doctrina celestial, no humana.
Creen también en la elección condicionada – Esto es, que la elección de dios de ciertos individuos para salvación antes de la fundación del mundo fue basada en que el previó que ellos responderían su llamada. Dios seleccionó solamente aquellos los cuales El sabía que por ellos mismos creerían libremente el Evangelio -una vez mas … no es esto salvación por obras?- Por lo tanto, la elección estuvo determinada o condicionada sobre lo que el hombre haría -dicen ellos.

Creen en la Redención Universal – Ellos argumentan que la obra redentora de Cristo hizo posible que todo el mundo fuera salvo pero actualmente no aseguró la salvación de ninguno. Es decir, Cristo murió eficazmente por algunos, pero no por otros. De nuevo, veamos que para ellos, todo depende de lo que la persona haga o no haga, es este punto, ellos (los Arminianos) creen que la redención de Cristo se hace efectiva solamente si el hombre escoge aceptarla.

El Espíritu Santo puede ser resistido – Ellos dicen que considerando que el hombre es libre, este puede exitosamente resistir la llamada a la salvación del Espíritu Santo. El Espíritu no puede regenerar al pecador hasta que este crea; la fe procede y hace posible el nuevo nacimiento.

Se puede perder la salvación – Aquellos que creen y son verdaderamente salvos pueden perder su salvación por fallar en mantener su fe. Qué? Quieren decir que nunca Dios da la certeza de la salvación? Eso nos deja a la par de los musulmanes quienes nunca saben si son salvos o no!

Hiper-Calvinistas (Aquel extremo de creyentes que equivocadamente ven el evangelismo como desobediencia, al creer que Dios es quien hace todo y que el hombre no tiene que hacer nada en su proceso salvífico. El Bautista Reformado cree en las Escrituras, quienes muestran que aunque el hombre no es quien inicia el proceso de Salvación, es el hombre, quien habiendo recibido los dones de la fe salvadora y del genuino arrepentimiento (esto se conoce como la aplicación de la Gracia por parte del Espíritu Santo), debe ir a Cristo, humillándose y proclamándole como Dios y Señor y rogando la Salvación que en Cristo hay a través del sacrificio redentor en la cruz del Calvario.)
Para concluir, permítanme tratar de aplicar estas cosas en nuestros corazones. En primer lugar, una palabra a mis colegas Bautistas Reformados: Apreciemos la importancia de nuestros distintivos (solo me he referido a algunos de ellos…) y amemos la sujeción total e irreservada a las Escrituras, a las doctrinas de la Gracia allí estipuladas y a la Confesión Bautista de Fe de 1689. Os exhorto humildemente a no entregarse a las presiones anti-bíblicas del cristianismo moderno ni a ninguna de sus blasfenas invenciones.

Hay muchas otros distintivos de la Iglesia Bautista Reformada, los cuales planeo (mediante la voluntad de nuestro Señor) escribir en un próximo artículo)

Para aquellos que están en iglesias que no se conforman a los principios presentes en las Escrituras, les imploro que oren y busquen del Señor, guía y dirección y que se puedan percatar de los peligros de estar en una iglesia llamada Cristiana, pero con principios y enseñanzas que no honran a Cristo.

Humildemente recordemos que… Es pecado tanto salir de una Iglesia con Doctrinas verdaderamente bíblicas cuyo testimonio en práctica es también bíblico, a razón de motivos o conveniencias personales , como lo es el permanecer en una iglesia que está en flagrante violación a las Escrituras.

Si estas verdades han hecho eco de alguna manera en tu corazón, es nuestro deseo que puedas buscar la guía y la dirección del Señor para la provisión de un lugar seguro para la alimentación y el cuidado de tu alma… Recuerda, sólo hay una oportunidad por así decirlo: esta vida. Que Dios te guarde y te guíe, esa será nuestra oración delante del Trono de Gracia de nuestro Señor y Dios.

Es pues así que concluimos este artículo con una amable y humilde exhortación,

Sólo a luz de las Escrituras podremos discernir, esto por la gracia de Dios, si las doctrinas que se enseñan en una iglesia honran legítimamente a Dios o No.
IBGP

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