viernes, 7 de febrero de 2014

Sin contiendas

Durante los años que tengo de ser cristiano y de servir a Dios no me he escapado de la realidad que a todo cristiano sucede; Tener debates bíblicos con otros. Esto es, por supuesto, algo que quizá yo no buscaba, y quizá es algo que los demás cristianos no buscan cuando suceden las conversaciones tocantes a la religión. Con el tiempo empecé a conocer más de la Biblia, de su contenido y hablar de ello resultaba fácil y emocionante. Temas como los dones espirituales, los instrumentos en la adoración, el guardar del sábado y otros eran llamativos y siempre estaba a la expectativa de que alguien que creyera lo contrario lo sacara a colación para empezar con la discusión. Un día hablaba con cierta señora y cuando la verdad implícita de la Biblia sobre un tema que tocábamos empezó a ir en contra de sus creencias sacó una frase, que por ahora es la razón de este artículo: “La Biblia no es para contender”, “ Dios no quiere que peleemos sobre estos temas sino que nos amemos ”, y además agregó “ cada vez que usted contiendo sobre la palabra de Dios está en pecado.” Como podrán imaginar, eso me dejo muy pensativo. ¿Era cierto lo que la señora decía? O ¿Debía yo defender mis creencias? En su razonar utilizan textos como 1 Timoteo 6:5 que dice: “disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de ellos” o 2 Timoteo 2:23 que menciona lo siguiente: “ Pero desecha las cuestiones necias e insensatas, sabiendo que engendran contiendas .” Todo esto con la intensión de probar que las contiendas o peleas con temas tocante a la Biblia no son recomendadas a los cristianos. Bien lo diría un antiguo maestro “ Sacar un texto fuera de contexto no traerá un pretexto .” En cuanto a las palabras de Pablo a Timoteo en ambos casos él está hablando de discusiones que desde un principio sabemos no llegarán a una buena conclusión. Pablo menciona a hombres que eran corruptos y privados de la verdad, hombres que, a pesar que con explícita verdad se les demuestre su error, no cambiarán. Esto es vano y lo mejor es apartarse de ellos. Hay también temas que son necios en sí mismos. Por ejemplo ¿era Jesús blanco, moreno o achinado? ¿Poseía Jesús cuerpo cuando vino a la tierra o era solo una fantasmal visión? Este tipo de pensamientos pasaban a través de la mente de los hombres de cuestiones necias e insensatas. Por ello hablar de esto no daría resultados positivos sino más bien contiendas. Al inicio de su redacción a Timoteo Pablo menciona lo siguiente: Como te rogué que te quedases en Éfeso, cuando fui a Macedonia, para que mandases a algunos que no enseñen diferente doctrina, ni presten atención a fábulas y genealogías interminables, que acarrean disputas más bien que edificación de Dios que es por fe, así te encargo ahora. (1 Timoteo 1:3,4). En este texto se observa claramente que las razones principales por las que Pablo dejó a Timoteo en Éfeso fueron: 1. Para que mandases a algunos a que no enseñen diferente doctrina. 2. Para que no prestasen atención a fábulas y genealogías interminables. La verdad es que, si bien es cierto, discutir con personas cerradas de la mente, prejuiciadas e ignorantes, es perder el tiempo y vano, éste no es el caso con todas ellas. Además tenemos como mandamiento de defender la Esperanza de fe que hay en nosotros (1 Pedro 3:15), y más aun contender por la fe una vez dada a los Santos. (Judas 3) y para concluir con palabras de Pablo a Timoteo vemos en 1 Timoteo 6:12,13 donde el apóstol aconseja al joven a pelear la buena batalla de la fe … habiendo hecho la buena profesión…imitando a Jesús mismo quien… dio testimonio de la buena profesión delante de Poncio Pilato .

No hay comentarios:

Publicar un comentario